Demasiado Sensible...

Ayer hablando con nuestra unica lectora cautiva, y por esas inesperadas serendipias que suelen producirse en el Messenger, aparecio el nombre de un viejo conocido mio, al que tenia medio abandonado: Charles Bukowski.
En Efecto, ya ni me acordaba como se escribia su apellido (sacrilegio!!!). Pero para tratar de enmendar mi perverso olvido, les regalo algunas lineas de un escrito del viejo Bukowski, donde hace iluminadas disquisiciones sobre la cocina y la personalidad de un hombre.

DEMASIADO SIMPLE

A menudo, el estado de la cocina es el estado de la mente, los pensadores son hombres confusos e inseguros, hombres flexibles. Sus cocinas son como sus mentes, llenas de basura, de cubiertos sucios, de impureza. Pero ellos son conscientes de su estado mental y encuentran cierto humor en el. A veces, en una violenta explosion de fuego, desafian a las deidades eternas y aparecen todos resplandecientes con lo que solemos llamar creacion; y lo mismo hay otras veces que estan medio borrachos y limpian sus cocinas. Pero pronto cae todo denuevo en desorden y ellos vuelven a verse en la oscuridad. Y necesitan pildoras, oracion, sexo, suerte y salvacion. El hombre que tiene la cocina siempre ordenada es un chifaldo, sin embargo. Cuidado con el. EL estado de su cocina es el estado de su mente: todo en orden, asentado, ese hombre a dejado que la vida le condicione rapidamente a un complejo vil y endurecido de oreden mental, defensivo y suave. Si le escuchas 10 minutos te daras cuenta de que todo lo que dice en su vida sera basicamente insignificante y siempre estupido. Es un hombre de cemento. Hay mas hombres de cementos que de otras clases. Asi que si buscas un hombre vivo, mira primero su cocina y ahorraras tiempo.<\span>